Una vez más la Ciudad Luz se viste de fiesta para la presentación de sus desfiles, los que atraen a una audiencia muy variada, que va desde las grandes damas de la sociedad internacional hasta las estrellas más famosas, salpicadas con artistas plásticos y hasta chicas jóvenes de importantes apellidos. En esta ocasión a la mexicana Salma Hayek se le vio en todas partes, siempre muy bonita, y apuntando hábilmente los modelos que le gustaban en el programa; y es que cuando una está casada con un billonario, ir de shopping es un pasatiempo delicioso, ¿cierto que sí? Por su parte, vimos a J.Lo en el desfile de Chanel, donde se convirtió en el centro de atención como parte de la audiencia. En Christian Dior estaba Kanye West, quien volvió loco a los paparazzi, mientras que en Givenchy, vimos a Rachel Zoe. Carine Roitfeld se apareció en el show de Chloé y a Kate Moss se le vio en el desfile de Saint Laurent (sí, ahora se llama así la maison que fundara Yves con tanto amor).
¿Y qué nos brinda la moda parisina para la nueva estación? ¡Lo mejor! Esta vez los diseños deportivos lo abarcan todo… como fue el caso de los looks presentados por HERMéS para los días más frescos, donde desfilaron modernas combinaciones en cuero en tonos como el gris, a llevar con faldas de ante sobre hot pants, que reaparecen en esta estación con éxito. Por su parte, en LOEWE, vimos preciosos vestidos de gamuza con capucha, en tonos brillantes como el naranja, a llevar con enormes y cómodos bolsos de cuero en el mismo tono. Asimismo, STELLA MCCARTNEY, una creadora muy innovadora, se impone en esta temporada con sus conjuntos de pantalones en los que protagonizaron los hombros pronunciados. En el desfile de CHANEL vimos elegantes trajes sastres de punto y otros en tweed, con mangas tres cuarto que estamos seguras se convertirán en un must, mientras que en el show de CHRISTIAN DIOR reinó un look más juvenil, con vestidos-abrigos cortos y de entalle perfecto. La diseñadora Phoebe Philo creó, para CéLINE, un estilo muy deportivo, sus blusas sin mangas en blanco, a llevar con pantalones negros de gran corte, son una invitación a no perderse.
En cuanto a la moda para la noche… ¡Todo es posible! Al menos así nos demostró GIVENCHY con sus vestidos coctel, los cuales desfilaron luciendo cierto allure que nos recuerda al gran Hubert, cuando manejaba su maison. Otra tendencia must, son los óvalos, los cuales en NINA RICCI se convirtieron en una opción obligada, muchos en beige y negro, con drapeados y sin mangas. Pero si está en busca de algo más tradicional, entonces los vestiditos cortos de un solo hombro, como los presentados por LANVIN, son la solución. Para llamar la atención, GIAMBATTISTA VALLI nos sugiere vestir de rojo, color que utilizó para crear preciosos modelos en encaje con chiffon, de un corte muy sofisticado. Por su parte, en BALMAIN reinaron los pantsuits, que en encaje y con texturas de fantasía, resultan muy modernos y coquetos. En esta temporada también vimos diseñadores presentar dos versiones de un mismo look como fue el caso del desfile de LOUIS VUITTON, donde las combinaciones del blanco y el marrón dieron mucho de qué hablar. Otro desfile que también marcó la pauta fue el de JOHN GALLIANO, donde se revivieron los escotes bateau, que fueron muy populares en los años 50 y los cuales se combinaron con bellos drapeados. En VALENTINO, el romanticismo sigue en “pie de guerra” y los vestidos largos de noche, con manguas puff y combinaciones de encaje, causaron sensación. Otro look que se impuso fue el presentado en SAINT LAURENT, donde todos sentimos que habíamos vuelto al pasado cuando Yves reinaba en su maison, ya que sus vestidos de gran soirée desfilaron poseídos de ese chic tan típico de la marca, en bonitos estampados como el color vino. Y como si todo eso fuera poco, ALEXANDER MCQUEEN, deslumbró con su propuesta para la noche, en la que protagonizaron bellos vestidos de encaje bordado que dieron mucho de qué hablar. ¡Bravo!